Con la llegada del nuevo Alcalde a la corporación han llegado cambios que desde Ganar Fuenlabrada valoran como “Un reparto que apacigüe las aguas de cara a 2019”; sabidas son las divisiones internas del PSOE de Fuenlabrada y con los últimos movimientos queda patente que las concejalías son solo moneda de cambio para tener un final de legislatura tranquilo.
La debilidad del proyecto socialista tras la salida de Manuel Robles se ve reflejada en varios aspectos:
- El nombramiento con dedicación exclusiva de un concejal para la junta de distrito del Naranjo, junta de distrito prácticamente sin atribuciones administrativas y que hasta hace poco presidía la concejala de igualdad. Este nombramiento, parece poco ético ya que sin tener apenas atribuciones el nuevo concejal delegado de esta junta de distrito va a percibir aproximadamente 2.500€ al mes, salario muy por encima de la media del barrio que preside.
- La nueva distribución de concejalías, deja muy claro que buscan unas medidas populistas, centradas en atraer el titular, pero que quedarán en nada, agrupar igualdad y policía, es un primer paso para feminizar la ciudad pero para Ganar Fuenlabrada es a todas luces insuficiente, desde la formación creen que crear una ciudad feminista toca muchos otros palos, educación, ocio, deporte, urbanismo y no vale solo con seguridad; por otro lado y de igual manera, unificar urbanismo con mayores, es otra vez, una medida escasa para la atención integral que necesitan los mayores, las dificultades para nuestros mayores son mucho más que las barreras arquitectónicas, ejemplo de ello son las movilizaciones en todo el país defendiendo unas pensiones dignas mientras el PP sugiere como solución los planes de pensiones privados.
- Por último desde la formación destacan que, aunque ha cambiado el alcalde, no han cambiado las prácticas políticas y así lo demuestran al no celebrarse el pleno ordinario correspondiente del mes de febrero, silenciando así la opinión de casi la mitad de los vecinos del municipio representados por la oposición. Desde GF creen que no puede haber peor inicio de mandato que saltándose un pleno ordinario, no dando cumplimiento al reglamento orgánico.
Por todo esto Ganar Fuenlabrada considera que los primeros pasos del nuevo alcalde son pasos muy inseguros sobre una base de barro y que podría acabar en resbalones que acabarán pagando las personas que habitan nuestra ciudad, Por ello piden al nuevo alcalde, retome el camino, convoque pleno ordinario, ejerza la transparencia necesaria en un ayuntamiento habilitando los cauces de participación y sea más ambicioso en sus propuestas de cambio.